El grupo SuperSeniors celebra diversos Premios a lo largo
del año, y como el más entrañable es el de Navidad lo hemos tomado como ejemplo
para este breve artículo. Celebramos la comida-entrega de trofeos en el restaurante
del Club, una simpática reunión de amigos, a la que asisten los que se han
batido con ardor deportivo por las calles del recorrido negro, los
simpatizantes y algunos cónyuges aficionados, ya que somos un grupo mixto donde
las golfistas han ganado el torneo en numerosas ocasiones e incluso el premio
al drive más largo.

Cualquiera puede contribuir al interés del juego y a la
brillantez del acto, patrocinando regalos que, después de tantos años, algunos
son ya clásicos, como el vino para el "drive más largo" de Jose, el
foie gras para el forrabolas de Claudio, el "más cerca del hoyo" de
Jane... aunque hay muchos y muy variados a elección de los donantes. El fundador
y coordinador del grupo, Enrique, que ha sido como siempre el organizador del
evento, ha echado unas cuantas horas de ordenador para preparar  las diversas clasificaciones, variaciones de
los hándicaps,  gráficos, y otros
detalles. Cuenta con otros colaboradores como Carlos para casi todo, Luis que
de vez en cuando hace e imprime nuestras originales tarjetas de juego, Rodolfo
con todo lo relacionado con las letras, diversas señoras con la organización de
la mesa, etc... Al amor de la copichuela servida en la barra, los jugadores
comentan los datos, recuerdan las incidencias más jugosas, los rabazos y
bolones, las anécdotas graciosas o heroicas, el azar y lo inevitable, lo
general y los detalles. Es el momento de renovar el repertorio de fotografías
que serán subidas a la excelente web del grupo 
www.superseniors.co.uk  donde también se encuentra toda la
documentación actualizada.

Una vez en la mesa,
decorada con los trofeos que se entregarán durante la comida, se explican las
novedades más relevantes que afectan al grupo de amigos, como, nuevos jugadores
que se han incorporado,  noticias de los
que no están, entre otras. Suena la campanilla y empieza la divertida entrega
de premios; la costumbre es que el anterior ganador elija el trofeo en liza y
lo entregue, como en el Master de Augusta, al nuevo. Los ganadores reciben los aplausos
de todos, abrazos, más fotos y bromas del respetable. Después se procede a la
popular rifa para los que no han conseguido subir al podio. Solo queda el
trofeo de consolación al forrabolas, el último clasificado del torneo, un
detalle simpático que se acepta gustosamente.

Finalmente, Enrique, tras un breve pero afectuoso discurso
para elogiar los méritos de Enrique Jarillo como deportista ejemplar, compañero
entrañable y excelente persona, le entrega, en nombre de los presentes, un
regalo de vidrio tallado para felicitarle en su ¡90 cumpleaños! Una prueba
evidente de los beneficios del golf a cualquier edad y especialmente para los
que vamos sumando ciertos años.